“Lo sabe, no lo sabe” presentado por Juanra Bonet arrasa en la época estival.
El nuevo concurso de Cuatro tiene una estructura bastante sencilla. La mecánica consiste en elegir un concursante en la calle para que busque a gente que conteste por él a una serie de preguntas que le harán ganar hasta 3.000 euros. Lo novedoso de este concurso es que el concursante deberá elegir entre los viandantes quien responderá por él para ayudarlo a ganar. Bajo la premisa “Lo sabe” deberán contestar correctamente, pero por el contrario, si la pregunta se formula con la premisa “No lo sabe” el concursante deberá encontrar a alguien que falle la respuesta sin previo conocimiento de las condiciones en juego, claro está.
Lo que en un principio salió de una propuesta de Mediaset, bastante sencilla y sobretodo económica, con pocas esperanzas de futuro para rellenar la franja del acces prime time, se ha convertido en una apuesta segura asentándose por encima del 5%, mejorando los datos de su predecesor en esta misma franja, “el cubo”. Y no solo eso , sino que también ha tenido una inmejorable acogida por las redes sociales, un dato muy a tener en cuenta en estos tiempos. Lo que no se esperaban en Mediaset es que el pasado viernes 17 de agosto el programa de Cuatro lograra un máximo histórico con un 7,4 % y 728.000 espectadores. Lo cierto es que con una rentabilidad difícilmente reemplazable, empiezan a plantearse si “Lo sabe, no lo sabe” podría funcionar tras el periodo vacacional.
Y es aquí donde comienza el conflicto, ya que
cuatro lleva promocionando de manera incansable el nuevo programa access prime time, “Guasap” presentado por Dani Martínez, coincidiendo con el concurso de Juanra. Los espectadores se han apresurado a presionar a la cadena para que cambie el nuevo show del copresentador de “Otra Movida” a la sobremesa, ya que esta se encuentra en horas bajas con Frank de la jungla al que le cuesta alcanzar el 5% de share. Aunque todo apuesta a que la cadena no tiene ninguna intención de mover el tan anunciado “Guasap”.
Yo creo que lo mejor es esperar a ver cómo se comportan las audiencias de
“Lo sabe, no lo sabe” cuando regresen sus competidores, y en caso de sufrir perdidas en sus audiencias reducir la emisión a un formato semanal para así evitar la saturación que puede producir el concurso en una emisión periódica.
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